Le pido a la vida que me dé un poco de fuerza, como si todavía quedara algo que merezca la pena por lo que luchar. ¿Qué coño puede hacer la fuerza en mi cuerpo si lloré tantas lágrimas que hasta inundé mi propia casa? No queda nada ya; es como un final anticipado. Abrí un documento Word y escribí en él: Me odias. Todo esto es una mierda. Siempre regocijándome en mi dolor, luciendo mis heridas en internet como si tuviera algún tipo de talento.
Cuando me preguntan “¿qué te pasa?”, bajo la cabeza: «Nada. No mires. No quiero que me veas roto».
Mentira: sí quería que miraran. Que vieran el desastre que soy.
Ella me tocó la mano en silencio. Esa caricia que sentí, que nunca pasó. Algo parecido a la paz, que olía a mar y a sueños rotos. Levanté la vista y sonreí. Su voz suave, como una aguja pinchando la vena, era como heroína para mí:
—Lo que los demás llaman verdad es solo otra mentira bonita.
—Tus sueños parecen falsos, pero son lo único que te mantiene vivo.
—No tengo poderes para salvarte. Solo puedo estar aquí.
Me acerqué a su cara. Quería besarla, pero sus ojos me devolvieron un tipo acabado, roto, con un montón de errores, disfuncional y patético.
Y ella, con esa voz temblorosa, dijo:
—Eso que llaman amor… yo lo vi en ti. Y fue oscuro. Y me dolió. Aceptarlo todo es imposible, pero incluso los errores, incluso los días que lloraste como un niño, también los amo.
Palabras que nunca me dijo. Palabras que me atravesaron como si me las hubiera dicho.
Muchas veces me habló de coraje, de que tirara para adelante. Pero borró todo, su vida y la mía. Jamás di los besos que quise; los borró el tiempo. Y el calor se acabó terminando, como se termina el verano. Ese corazón podrido quiere guardar recuerdos, pero no puede, porque nunca existieron. Solo se guarda una herida, que es lo único que quedó de toda esta historia. Una historia que sigue. Siempre sigue. Aunque no quiera. Y yo me sigo hundiendo en ella, sin la alegría de vivir como Heredia.
De tu gloria
Ha pasao por mí
Ahora siento y pienso adentro
Alegría de vivir
Alegría de vivir
Cuando estás cerca de mi
Ahora siento y pienso adentro
Lo que habrá dentro de mí
Lo que habrá dentro de mí
Lo que habrá dentro de mí
Yo lo busco y no la encuentro
Mi manera de sentir
Mi manera de sentir
Mi manera de sentir
Yo la busco y no la encuentro
Mi alegría de vivir
Y el infierno de tu gloria
Ha pasao por mí
Ahora siento y pienso adentro
Alegría de vivir
Mi manera de sentir
Lo que habrá dentro de mí
Lo que habra dentro de mí
Yo la busco y no la encuentro
Mi manera de sentir
Mi manera de sentir
Mi manera de sentir
Yo la busco y no la encuentro
Mi alegría de vivir
Y el infierno de tu gloria
Ha pasao por mi
Ahora siento y pienso adentro
Alegría de vivir
Alegría de vivir
Cuando estás cerca de mí